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LOS CRISTIANOS SOMOS RADICALES

soy un cristiano radical

Yo soy muy «radical»:

– Creo que sólo hay dos sexos: hombre y mujer. Y no son iguales, son complementarios.

– Creo que la vida humana comienza con la unión del  óvulo y el espermatozoide (concepción), no a los tres meses.

– Creo que la vida humana es más sagrada que los árboles, las ballenas, la «madre naturaleza»: el hombre ha sido diseñado para señorear, y a través de sus habilidades cognitivas «como de los dioses», hacer uso de la naturaleza para el mejoramiento de sus condiciones.

– Creo que la mejor política es la que achica el Estado y protege la Vida, la Propiedad y la Libertad de cada individuo.

– Creo en la Familia, no en el hiperindividualismo: no crecemos en los árboles, somos producto de la unión de un hombre y una mujer, y somos por diseño, seres sociales, es en la «tribu» que adquirimos propia identidad.

– Creo que el Cristianismo ha sido una fuerza para gran bien, no el «opio de las masas»: donde quiera que vaya, el Cristianismo trae consigo las semillas de la libertad, la cooperación social y un efecto civilizador.

– Creo que cada persona tiene pleno derecho a los frutos de su propio labor, y que nadie, ya sea persona o gobierno, tiene el derecho de tomar lo que es suyo para dárselo a otro, sin importar cuán «noble» sea la causa.

– Creo en la Nación, no en el «nuevo orden mundial», esa nefasta utopía del hombre pagano moderno sin fronteras, sin religiones y con una sola moneda, y una gran Torre de Babel (es decir, Estado) que nos une y nos gobierna a todos: todas las naciones deben resistir estas tendencias globalistas, y cada familia e individuo deben luchar por su autonomía.

– Por último, solamente para rematar: el Islam no es una religión de paz, el feminismo no se trata de igualdad, el comunismo no beneficia a los pobres, el progresismo nada que ver con el progreso y el animalismo, abortismo y ecologismo son las falsas religiones panteístas de los estatistas que tienen en poco la dignidad de la vida humana … y todas estas ideologías no son más que tramas que aparentan «virtud» pero en actualidad solamente nos esclavizan más al falso dios del anti-teísta, el Estado leviatán.

Así que, estáis advertidos, si me sigues a mí y mis publicaciones, os volveréis radicales también. ¡Que tengan una semana muy productiva!

Autor: Joshua Enior Jiménez.

 

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